Gravar la riqueza extrema para acabar con la desigualdad es prácticamente la única medida posible para reducir la creciente brecha entre pobres y ricos, situación que se repite en prácticamente todos los países del sur global. Así lo señala el informe Oxfam publicado recientemente.
En pocas palabras, el hecho es que la fortuna de los multimillonarios está creciendo a un ritmo de 2700 millones de dólares al día, al mismo tiempo que al menos 1700 millones de trabajadoras y trabajadores viven en países en los que la inflación crece por encima de los salarios. Durante la última década, los súper ricos han acaparado el 50 % de la nueva riqueza generada, cifra que acaban de superar en el período pos-pandemia.
El informe “La ley del más rico. Gravar la riqueza extrema para acabar con la desigualdad” se ha publicado a inicios del 2023, justo cuando comienzan las reuniones del Foro Económico Mundial en Davos. Ahí, mientras las élites económicas y financieras más poderosas del mundo se reúnen en una de los más paradisíacos centros de esquí de Suiza, el informe revela cómo la riqueza y la pobreza extremas en el mundo se han incrementado simultáneamente por primera vez en 25 años.